El brioche es un bizcocho de origen francés, un tipo de masa de pan, blanda tipo pan de molde, y dulce. Es muy ligero y esponjoso, porque la masa es fermentada. La receta es la misma para un pan, como en este casa, que para realizar pequeños bollitos. También permite decoraciones variadas (la típica es con azúcar en la parte superior), pero esta misma masa, puede servir para bollos rellenos dulces y salados



Esta receta es una adaptación de la de Xavier Barriga, en su libro de Bolleria

Ingredientes:
- 500 gr de harina de fuerza
- 10 gr de sal
- 100 gr de azúcar
- 3 huevos
- 100 gr de mantequilla fria
- 120-130 ml de leche entera
- 40 gr de levadura fresca
- ralladura de media piel limón
- ralladura de media piel naranja
- 1/2 cucharadita de canela
- 1 huevo para pintar
- 1 pizca de sal

En primer lugar hay que recordar que es una masa fria, esto quiere decir, que todos los ingredientes tienen que estar fríos, especialmente la mantequilla. Para ello, después de pesar la mantequilla y cortarla en cubitos, vuelve a meterla en la nevera hasta que la vayamos a utilizar. 

Esta receta se puede hacer a mano, pero el amasado es largo, por eso es poco recomendable. Yo he utilizado mi robot de cocina con el gancho de panadería, y ha estado amansando aproximadamente 40 minutos.. ¡¡¡¡ imaginaos si lo hacéis a mano¡¡¡. Aún así, si decidís hacerlo a mano, tenéis que ir dejando la masa reposar a cada rato, por dos motivos: el primero para descansar vuestro brazo, y el segundo, para que la masa no coja calor.

En el cuenco de amasar, incorporáis todos los ingredientes, excepto la levadura, la mantequilla y un poquito de leche (estos ingredientes tienen que volver a la nevera para que no pierdan el frío). Se empieza el amasado siempre a velocidad media. Primero la masa adquiere la forma de migas, y poco a poco se va todo integrando bien. En ese momento, se añade la mantequilla en dados. Se sigue amasando hasta que esté todo integrado. Como digo es un amasado largo, no desesperéis. Poco a poco, la masa se va ligado, y se empieza a despegar de las paredes del recipiente. Es el momento de disolver la levadura en el poquito de leche que quedaba e incorporarla a la masa. De nuevo, la masa perderá su forma, y se volverá más líquida, pero si se sigue con el amasado, poco a poco, y esta vez en menos tiempo, se vuelve a compactar y a despegar del recipiente. Este es el punto en el que la masa está perfecta. 

Otro indicativo, es que cuando la saquéis del recipiente, podéis hacer una bola, y apenas os quedarán restos en las manos. Otro más, si cogéis una porción y la estiráis, se queda como una cortina casi transparente y elástica.




Bueno, conseguida la masa, se pasa a un recipiente engrasado, se tapa con film transparente y se deja reposar en la nevera, aproximadamente 1 hora.

Se saca de la nevera, y se amasa ligeramente, dando forma a los bollitos. En mi caso, cómo quería hacer pan, lo he puesto en un molde de panadero. Se pincelan los bollitos o el pan, con el huevo batido con la sal (la sal solo sirve para dar más brillo a la pieza).

Se vuelve a dejar reposar en la nevera una media hora. Después se saca de la nevera y cubierto con un paño seco, se deja reposar en un lugar fresco y seco, durante una hora aproximadamente o hasta que comprobéisque ha doblado su volumen.


Calienta el horno a 200ºC y hornea. Si son bollos pequeños, con 15-20 minutos será bastante. En este caso, al ser un pan, requiere más tiempo, aproximadamente 40 minutos. Es conveniente cubrir con un papel de aluminio la superficie para que no se queme y quede con ese color marrón tostado tan característico.

Dejar enfriar sobre una rejilla, y después desmoldar.



Ya veis que es muy fácil.

Os anímo a hacerlo¡¡¡¡


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